Mientras se sobrevuela el Cañón del Colorado en Helicóptero, puedes agudizar la vista para buscar algo que te hará millonario de la noche a la mañana, se trata nada menos que de un tesoro escondido en algún lugar del Gran Cañón.

Según cuenta la leyenda, un grupo de guerreros llegó del sur escoltado por una larga caravana de esclavos, arrastrando cajas envueltas en pieles. La expedición se dirigió directo al Gran Cañón y descendió por el Risco Sur. El tesoro que llevaban los esclavos se colocó en la cueva que obviamente había sido seleccionada con anterioridad por los guerreros.

Los esclavos que llevaban fueron muertos al momento y la mitad de los guerreros se quedó a custodiar el cargamento, esperando posiblemente que los españoles en poco tiempo fueran devueltos al mar y los mexicas recobrarían su tesoro.

Pasaron los meses y los años y los españoles permanecieron por lo que los custodios comenzaron a casarse con los Paiute, pasando a ellos la advertencia de que el tesoro debía ser cuidado a toda costa, nadie debía saber de su existencia, si desobedecían toda la tribu Paíute sería aniquilada. Si lo resguardaban un gran emperador vendría del sur a dar prosperidad a los Paiute.

En 1907 unos hermanos dijeron haber encontrado la cueva y el tesoro perdido de Moctezuma, decían que los Paiute los habían conducido al lugar, pero que les habían hecho prometer que solo llevarían lo que pudieran cargar. La cueva brillaba en la luz de las antorchas con tanto oro en ella; ídolos, escudos y otros objetos reflejaban y brillaban como estrellas, rompiendo la oscuridad de la caverna. Cuando corrió la noticia, cientos de exploradores deseosos de encontrar las cuevas se dirigieron al lugar, pero pasaron los años y al no aparecer ningún tesoro, la emoción y los excursionistas dejaron de llegar.

Anteriormente a ellos un hombre llamado James White en 1867 fue encontrado maltrecho por unos granjeros mormones. Entre Grand Junction y Moab su expedición fue atacada por indios, si estuvieras en el Cañón del Colorado en Helicóptero por esa zona, podrías buscar indicios que te apuntes a la ubicación precisa de la batalla, una buena pista para comenzar a buscar el tesoro. James se escapó navegando por el río y platicaba que durante su huida para resguardarse del calor entró a una cueva en la que encontró enormes ídolos con oro, máscaras de plata y turquesa, armas de todo tipo, gemas y piedras preciosas, pero estaba tan molido que no recordaba la ubicación.

El acceso en aquellas épocas al Gran Cañón era casi imposible, por lo que es muy interesante que haya dos historias separadas por tantos años que hablen en forma tan similar del tema y de la descripción de la cueva. Tal vez utilizando Google maps o en una excursión al Gran Cañón, alguien algún día pueda identificar la zona exacta y mostrar al mundo uno de los tesoros perdidos más famosos de la historia, tal vez los Paiute aún guardan el secreto y están esperando el momento apropiado para entregar el tesoro al verdadero dueño.